Para JUAN L. ORTIZ
Desde luego
existió antes, mucho antes.
Pero es como si Ella
la Poesía
hubiese nacido aquí
porque aquí
ganó su palidez de niña
al tiempo que su riqueza
de fuego.
Y le pidieron todo
y pretendidamente todo le sacaron
menos el poema
su forma de vivir.
Juan Laurentino:
Hay lugares para nacer
y otros para morir
como hay tiempos para sembrar
y tiempos para cosechar.
Pero no es casual
que Ella
se haya irradiado
desde aquí.
Ya es grande su edad
pero, como casi todo,
es la reseña de la vida.
Los hijos
y las hijas
de sus hijos
ya no se desentienden
frente a un mundo
que no ve todo claro.
Es que en este continente arruinado
no existe, no
el minuto
de la tranquilidad.
Es, también, Ella
como un niño que ríe
y flota hacia arriba
ascendiendo
desde un árbol
solitario.
Puerto Ruiz (e/ríos) - 1976