Yo ví nacer la luna desde el fondo del río.
Enorme. Amarilla.
La ví asomarse con bordes nítidos y sombras inciertas.
La ví envolverse ella misma con un manto sepia
y ví a la noche extenderse más allá del límite
para contenerla.
Luna. A la una y a las dos y a las tres...
Ya sube, pierde peso, se vuelve blanca.
Levita sobre el río la luna llena.
El agua se llena de luna.
Abre su lecho el río.
Se recuesta la luna.
Esparce su luz sobre las piedras
y se hace espuma.