Manchín viene enredando paisajes en sus ojos:
lomas verdes, arroyos azules, ceibos rojos...
Los caballos al trote. El eje que rechina,
la rueda que se atasca, la horquilla que se inclina,
el sueño que se quiebra y el pasto que se pierde…
¡Salud, Manchín, que traes en tu carro el buen día
y esa alegría sana, esa inmensa alegría
del paisaje rural y el campo verde!