OH, ALLÁ MIRARÍAS...

                                         OH,   ALLÁ   MIRARÍAS...


Ohallá mirarías


  con un noviembre de jacarandaes...   sí, sí.
Pero, amigo,
si no habrá, del otro lado, domingos 
                                      de niñas... 
ni menos en lo ido 
lilas
de prometidas... 
O mirarías
                     con un infinito de islas y otra vez morirías, sin morir 
                                                                en unas   como  ultra-islas ?
  Mas amigo,  qué  otro infinito,   allá,  podría repetirme
          y aun  desdecirme 
        en el juego con un confín
que   no   sería
                                      confín ? 
O entonces con lo que restase
de río
en el estuario que dicen? 
           Qué tiempo, amigo,
qué  tiempo, por Dios,  para los  tiempos
    en lo que a ellos los ahogara...todavía ? 
    Ni con un junco, así?
  Dónde los juncos,   niño mío, en un inconcebible
de   orillas ? 
Un sentimiento, pues,
soñado por el noel no, sin límites?
           O un crecimiento, allá, en un modo de existencia y no de vida?
       O donde nada, por tanto, sería,
de la negación misma, una manera de fermentación hacia el si
de unas  espumas  de jardín... 
o hacia ése que las ramas y las hojas, póstumamente, habrían
          perdido 
pero en un ir
sin fin...:
espíritus, entonces, por momentos, de unas 
                       azucenas a la deriva…

Mas,   qué   allí. .. 
qué de los ojos de violeta,  y de los ojos de verdín,
y de los ojos    de los narcisos, 
y de  esos  ojos   que les  transfiguran,
en iris
de la  eternidad,  sus minutos, mas  desde las arenillas 
de aquí?