EL CARPINTERO

 

EL CARPINTERO

 

 

El nombre del carpintero común o bataráz es Chrysoptilus melanolaimus perplexus. Hay distribuidas en la diversas regiones de la argentina unas veinticinco especies de carpinteros, de las cuales se hallan ocho en la provincia de Entre Ríos.

 

 

 

 

 

 

Como pobre, vive a saltos,

pero alegre y sin renuncios.

Sabe ganarse la vida

como obrero corajudo.

En medio de su pobreza

se empaquetó como pudo:

un ropaje bataráz,

pero bataráz de lujo,

y un bravo copete rojo

que lo empenacha de orgullo.

Requisa insectos y larvas

en los lugares ocultos;

y reserva de energías

para el constante ejercicio.

Hurga huesitos y hendijas

con entusiasmo prolijo,

sin perdonar una araña,

sin que se escape un bichito.

Y todavía lo encuentran,

picoteador, movedizo,

cuando el sol detrás del monte

quiere quedarse dormido

y desde el hueco de un árbol

lo está llamando su nido.

Las horas le salen cortas,

el día le queda chico.

Con el ardor del trabajo

y con la fiebre del brinco,

en la ronda bailadora

va tejiendo su destino.