Como ya dijimos, el día en que el Australántropo o alguno de sus congéneres llegó a comunicar, no sólo una experiencia concreta y actual, sino el contenido de una experiencia subjetiva, de una “simulación” personal, nació un nuevo reino: el de las ideas.
JACQUES MONOD,
El azar y la necesidad
Vivir en familia en el arco de los hechos cotidianos
en el aire de la cocina que pierde gas en ese complicado arreglo
que nunca llega de la canilla que gotea en el patio de una parte
[de la zona
en la que Ezra Pound vivía con su barbita blanca más bien fascista
yo lo encontré una vez en un ómnibus que iba desde Montevideo
hacia el mar de las altas gaviotas del sur y las playas bravas con
[altas
marineras olas de viento y despeinadas en su cara de mujer de pelo
[corto
-ahora así la veo detrás del aparato de televisión en un aviso
publicitario
en las playas de Tahití-
me sorprendió su instinto y sus dientes como comiéndose una
[naranja
a mordiscones: la vida. La vida era devorada mientras yo intentaba
débilmente con arreglos parciales
dejar también mis dientes en sus nalgas redondas como planisferios
para salvación de los últimos descubridores del Nuevo Mundo
esos que no abrieron la puerta de la cocina para ver si la leche
[estaba
hervida en las hornallas mientras él se paseaba en su torre de marfil
-como dijiste ayer bajo una lámpara de ginecólogo-
y no es verdad no es verdad no hay dos figuras en nadie ni habrá
[una doble
vida en este verano ni en aquel otro ni en el mar ni en las playas
sino solamente un deseo de vivir en familia
apretar el fósforo entre los dedos y seguir escribiendo contra
[viento y marea
una vez que hayamos pasado el cerco de ligustros y entremos
en el tiempo de las naranjas maduras hacia el límite
de los pájaros que escuchábamos
en la siesta
desde la cama y con la almohada húmeda
Yo lo encontré después en una conferencia y también cuando le
[dieron el
Premio Nobel no era sin duda el viejo rinoceronte que se
[levantaba tarde
lo extraño lo extraterrestre lo mágico es que nosotros dos sí
podríamos vivir en familia, yo con mí y vos con tus negativas
[y tus
deseos de salir todas las noches y andar por la gran ciudad ir a
[los cines
morirse en brazos de un astro del cine mudo
sin que nadie advirtiera la más leve fisura en
esta relación que llevamos
para sorpresa de todo el mundo.