José Solís S.J. nos habla de las serpientes venenosas
y de los cascabeles (tintinean en los platillos de oro de las bailarinas)
de las cortes florentinas, danzas de salones barrocos)
nos describe su color / rojo /
(búfalos de Altamira cuando uno puede ver las
oscuras cavernas paleolíticas de la mujer amada)
y cómo esas víboras de ojos fosforescentes alumbran de noche
el paso de los indígenas perdidos en la selva de sus pesadillas,
y aunque Plinio dudaría más o menos escéptico o envidioso
Jolís describe una grande del tamaño de un buey o de
un gomero de la India
sobre el cual durmieron con el Cacique Tellogotí de la
[Nación Giapitallagá
y el Cacique Aglaiquí de la Nación Toba.
Durante varios siglos se creyó que todo era una mentira
una exageración de los chronistas
hasta que en 1970 dos astronautas que regresaron del espacio
habían crecido 4 centímetros y medio de estatura.